Resumen
ANTECEDENTES
tras la introducción de la estimulación combinada o electroacústica (e AS), ha surgido un gran interés por preservar la audición residual
de algunos pacientes aptos para implante coclear, ya que ofrece mejores posibilidades de desarrollar habilidades auditivo-lingüísticas
mediante el efecto sinérgico entre ambas tecnologías. u no de los principios básicos para la conservación de la audición residual es
el uso de implantes cocleares con electrodos pequeños, compactos, flexibles o precurveados que faciliten su inserción, evitando dañar las estructuras adyacentes. La inserción directa de los electrodos a través de la membrana de la ventana redonda disminuye el traumatismo acústico y quirúrgico generado por el fresado excesivo realizado en las cocleostomías promontoriales; reduce, también, la pérdida de perilinfa y la entrada de polvo de hueso y sangre a la rampa timpánica, así como la liberación de metabolitos tóxicos hacia las porciones apicales de la cóclea, todo lo cual tiene efectos nocivos en la conservación de la audición residual. e l conocimiento preciso de la anatomía del nicho de la ventana redonda y sus variantes morfológicas normales, y la experiencia en correlacionar los hallazgos obtenidos mediante tomografía y disección son de gran importancia en la práctica quirúrgica del otólogo durante la colocación del implante coclear, ya que le permiten predecir con exactitud los hallazgos desde la valoración preoperatoria y las posibles dificultades técnicas para la inserción electiva de los electrodos a través del tímpano secundario. e sta información contribuye a la planeación del mejor abordaje quirúrgico para lograr una inserción atraumática de la guía de electrodos en aras de preservar la audición residual. h asta ahora no se han publicado estudios que aporten información acerca de la correlación morfológica del nicho de la ventana redonda por tomografía y disección, por lo que resultaría de gran utilidad valorar si existe.
OBJETIVO
determinar si hay correlación morfológica del nicho de la ventana redonda por tomografía y disección, así como de sus dimensiones.
MATERIAL y MÉTODOS
Se utilizaron diez huesos temporales humanos, a los cuales se les realizó una tC con reconstrucción oblicua, en un plano paralelo
al canal semicircular posterior y centrado en la ventana redonda. Se midió la longitud de la membrana de la ventana redonda, la
profundidad del nicho y el ancho del opérculum, y se valoró la morfología (cónica vs cilíndrica) del nicho. después, se efectuó una mastoidectomía simple con abordaje del receso del facial ampliado, a través de una timpanotomía posterior, hasta identificar el nicho de la ventana redonda. Se documentaron las imágenes más representativas de la disección. Se midió el ancho del opérculum y se determinó la morfología del nicho de la ventana redonda. Se compararon los hallazgos encontrados tomográficamente y durante la disección para determinar si había una correlación morfológica y de las dimensiones del nicho de la ventana redonda.
RESULTADOS
La morfología del nicho de la ventana redonda encontrada portomografía y disección fue cónica en ocho huesos temporales (80%)
y cilíndrica en dos (20%). e n el hueso temporal v I se apreció una morfología cónica invertida, con un diámetro del opérculum mayor, en
comparación con la longitud de la membrana de la ventana redonda.
La visibilidad del tímpano secundario durante la disección fue posible en todos los casos; de forma completa en seis huesos temporales (60%) y parcial en cuatro (40%), a expensas de la prominencia del labio
anteroinferior u opérculum. Los huesos temporales en donde hubo una exposición parcial de la membrana de la ventana redonda (huesos v, VI, VII, IX) correspondieron tomográficamente a los casos en los que el ancho del opérculum era menor. Asimismo, correspondieron a los diámetros del opérculum más estrechos obtenidos durante la disección. el ancho máximo del opérculum calculado por t C fue de 2.5 mm (hueso temporal I) y el mínimo fue de 0.96 mm (hueso temporal IX), con una media de 1.47 mm. el ancho máximo del opérculum encontrado durante la disección anatómica fue de 2.3 mm (hueso temporal I) y el mínimo de 0.95 mm (hueso temporal IX), con una media de 1.44 mm. La profundidad del nicho y la longitud de la membrana de la ventana redonda se evaluaron tomográficamente de forma exclusiva.
La profundidad del nicho varió de 0.9 a 1.17 mm, con una media de 0.94 mm. La longitud de la membrana fue, en promedio, de 1.13 mm, con límites de 0.80 a 1.33 mm.
CONCLuSIONeS
existe una correlación morfológica del nicho de la ventana redonda (cónica vs cilíndrica) por tomografía y disección, así como de la medida del ancho del opérculum o entrada del nicho, la cual es estadísticamente significativa. Se recomienda la reconstrucción tomográfica oblicua descrita en este trabajo, principalmente a los cirujanos con menor experiencia en cirugía de implante coclear, con el fin de obtener detalles anatómicos finos del nicho de la ventana redonda que le sean útilespara elegir el abordaje más conveniente para la inserción atraumática de los electrodos del implante coclear, idealmente a través del tímpano secundario, en aras de preservar la audición residual.
Palabras clave: nicho de la ventana redonda, implante coclear.